La primera recopilación de obras bajo el epígrafe de este maestro neerlandés fue realizada por Friedländer, quién se basó en dos tablas de un políptico con la Leyenda de la Magdalena fechadas hacia 1515-1520. Una de éstas, El sermón de María Magdalena, pertenece en la actualidad a la colección del Philadelphia Museum of Art y la otra, titulada La Magadalena antes de la conversión, que se conservaba en el Kaiser-Friedrich Museum de Berlín, fue destruida durante la Segunda Guerra Mundial. Posteriormente Maquet-Tombu realizó una reconstrucción del políptico, añadiéndole cuatro pinturas mas: Noli me tangere y Luis X de Francia con donantes y santa Margarita de Antioquia, ambas en el Staatliches Museum de Schwerin; El banquete en casa de Simón el fariseo, del Szépművészeti Múzeum de Budapest, y La Resurrección de Lázaro, del Staatens Museum for Kunst de Copenhague. Otros trabajos que se le han atribuido son el retablo de La Anunciación, del Musée d’Art Ancien de Bruselas; El Descanso en la huida a Egipto, de la National Gallery of Victoria de Melbourne; La Sagrada Familia, del Koninklijk Museum voor Schone Kunsten de Amberes, y La Virgen de la Anunciación, del Westfälisches Landesmuseum de Münster.

Pese a no ser un pionero, su obra se encuentra entre la tradición arcaizante, que seguía los dictados de Van der Weyden, y las innovaciones artísticas de Bernard van Orley. Asimismo, en lo que a los rostros se refiere, desarrolló un modelo específico, caracterizado el masculino por ser triangular, con los ángulos duros y de huesos muy marcados, y el femenino más suave y redondeado y generalmente con los ojos semicerrados. También destaca su labor como retratista, aunque sus pinturas son de difícil adscripción por las diferencias estilísticas que presentan. Entre ellas se encuentran: El retrato de Margarita de Austria, del Musée du Louvre de París, y el Retrato de un hombre, del Musée des Beaux-Arts de Dijon.

Obras