Como parte de la celebración del centenario del barón Thyssen-Bornemisza (1921 / 2021), el museo prolonga el montaje que  viene dedicando a la figura de su fundador a través de los retratos que el pintor británico Lucian Freud le realizó entre 1981 y 1985, y que evidencian la profunda complicidad y la larga relación artística que se entabló entre ambos.

El primero pertenece a la colección permanente y muestra al barón en un plano próximo al espectador. El segundo es un retrato de cuerpo entero y pertenece a la familia Thyssen-Bornemisza, que lo ha prestado para la ocasión. Completa el conjunto el óleo Pierrot contento (1712), de Jean-Antoine Watteau, que aparece al fondo del primer retrato, sobre el hombro del barón, y cuya figura principal pudo haber sido referencia para Freud en la elaboración de la segunda obra.