La quinta entrega de la serie <miradas cruzadas> está dedicada a la representación del intimismo en la pintura. Juego de interiores. La mujer y lo cotidiano reúne una selección de diez obras de las colecciones permanentes del Museo que comparten el gusto artístico por retratar asuntos de la vida cotidiana, familiar o íntima. Relacionadas temática o formalmente pero de épocas y procedencias diversas, el diálogo entre ellas permite mostrar parte de la evolución de un género desde la Holanda del siglo XVII, cuando estos espacios alcanzaron su independencia como género pictórico, pasando por la pintura francesa del XVIII, donde se popularizaron las imágenes de figuras femeninas en el marco de sus estancias privadas, a la descripción de escenas domésticas del siglo XIX y principios del XX.
Esta instalación puede verse en la sala mirador de la primera planta, con acceso directo desde el hall central. La entrada es gratuita.