Frank Auerbach fue uno de los representantes de la llamada Escuela de Londres, un grupo de artistas amigos entre los que se encontraban Francis Bacon, Lucian Freud y Leon Kossoff que mostraron un gran interés por la representación de la figura humana.

De origen judío, Auerbach nació en Berlín y en 1939 fue enviado a Inglaterra para escapar de la Alemania nazi. Creció en Kent, en una escuela para niños judíos refugiados que fue trasladada a Shropshire durante la Segunda Guerra Mundial. Desde 1948 estudió en la St.Martin’s School of Art y acudió a las clases nocturnas de David Bomberg en la Borough Polytechnic. Durante estos años de formación, en los que estableció amistad con Kossoff, aprendió la importancia de representar las formas de manera orgánica y unitaria. Desde 1952 a 1955 acudió a clases en el Royal College of Art y un año después la Beaux Arts Gallery de Londres celebró su primera exposición individual. Su técnica empastada, que enfatizaba la gestualidad de la pincelada y que dotaba a la obra de una gran tridimensionalidad, recibió muchas críticas de los que pensaban que se acercaba más al carácter de una escultura que al de la pintura, pero encontró el importante apoyo del crítico David Sylvester. Desde 1965 expuso en la galería Marlborough y en 1978 la Hayward Gallery organizó una muestra individual de su obra.

Auerbach ha trabajado los mismos temas a lo largo de décadas. Su interés por el retrato se ha centrado en representar a personas que conocía bien y, en la mayor parte de los casos, se ha reducido a tres modelos: su mujer Julia, la modelo profesional Juliet Yardley Mills (J. Y. M.) y su amiga Estella West (E. O.W.). Asimismo, sus paisajes suelen representar los alrededores de su estudio en Camden Town en el que trabaja desde 1954.

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