Semana de celebración: actividades y acceso gratuito

El barón Thyssen-Bornemisza declaró en repetidas ocasiones que la pintura era la mayor de sus pasiones. Pero también admiraba la música y siempre que podía asistía a conciertos, como cuando en abril de 1961 escuchó las nueve sinfonías de Beethoven que su amigo Herbert von Karajan interpretó en el London Royal Festival Hall.

Beethoven, Mozart, Haydn, Händel o Bach y sus dos hijos, Carl Philipp Emanuel y Johann Christian, eran sus compositores preferidos, tal y como él mismo compartió en sus memorias. Por ese motivo, las piezas elegidas para la ocasión son obras de Bach, Haydn, Mozart y Beethoven, que se repetirán en las ocho sesiones programadas entre las 10:30 y las 18:30, con una duración aproximada de un cuarto de hora cada una.

Un vez comience el concierto, no se permitirá el acceso.

Los días 16, 17 y 18 de abril, le llega el turno a la música compuesta en los siglos XIX y XX, vinculándola con algunos de los movimientos artísticos favoritos del barón Thyssen-Bornemisza - el impresionismo, las vanguardias norteamericanas y europeas -, con seis conciertos organizados en colaboración con el Centro Superior y Fundación Katarina Gurska.

16 de abril: Sonidos del impresionismo (16.30 y 18.30): Composiciones de Debussy y de Ravel, máximos representantes del impresionismo musical, así como de Sancan, fiel seguidor de Debussy. Todos ellos experimentaron con el timbre y dotaron a sus obras de un tempo más libre, creando una atmósfera sonora imprecisa, como la línea en la pintura impresionista.

17 de abril: Vanguardias europeas (11.30 y 13.30): Obras de Univers Parallèles, 5 aforismos de Schnittke y 12 notaciones de Boulez, compuestas en el siglo XX y paralelas en tiempo y forma a los movimientos artísticos de vanguardia en Europa, como el expresionismo o el futurismo. Destacan en ellas los sonidos estridentes y fuertes, grandes contrastes tímbricos y el uso frecuente de la distorsión.

18 de abril: Aires de norteamérica (11.30 y 13.30): Desde el jazz al neo-romanticismo, pasando por el minimalismo y el expresionismo abstracto, el programa elegido quiere resaltar la pluralidad y riqueza de la música vanguardista norteamericana.

Una vez comiencen los conciertos, no se permitirá el acceso.