August Macke
Meschede, 1887-Perthes-les-Hurlus, 1914
August Macke, uno de los principales componentes del grupo expresionista alemán Der blaue Reiter (El jinete azul), vivió un período especialmente innovador dentro del arte de su país en el que, mientras se desarrollaban las principales tendencias expresionistas, iban difundiéndose los sucesivos movimientos de vanguardia procedentes del resto de Europa. Como un verdadero contemporáneo de su tiempo, Macke supo integrar en su pintura los aspectos que más le interesaron de la vanguardia.
Vivió la mayor parte de su vida creativa en Bonn, salvo algunas estancias en el lago Thun, en Suiza, y varios viajes a París, Italia, Holanda y Túnez. En París, adonde viajó por primera vez en 1907, conoció la obra de los impresionistas, y poco después, en Berlín, estuvo unos meses en el estudio de Lovis Corinth. Su estilo artístico se inició dentro del impresionismo y el postimpresionismo francés y atravesó más tarde una fase fauve. En 1910, a través de su amigo Franz Marc, conoció a Kandinsky y durante un tiempo compartió la estética no-objetiva y las preocupaciones místicas y simbólicas de Der blaue Reiter.
El encuentro en París con Robert Delaunay, en 1912, fue para Macke una auténtica revelación. El cubismo cromático del artista francés, bautizado por Apollinaire como orfismo, se impuso en su pintura a partir de entonces. Los Escaparates de Macke pueden ser considerados una personal interpretación de las Ventanas de Delaunay combinadas con la simultaneidad de imágenes del futurismo italiano. El ambiente exótico de Túnez, adonde viajó en 1914 junto a Paul Klee y Louis Moillet, fue determinante para la creación de la estética luminista del final de su vida, etapa en la que realizó una serie de obras consideradas como obras maestras del color.
Su carrera se vio truncada por su prematura muerte en el frente de la I Guerra Mundial, en septiembre de 1914.
Vivió la mayor parte de su vida creativa en Bonn, salvo algunas estancias en el lago Thun, en Suiza, y varios viajes a París, Italia, Holanda y Túnez. En París, adonde viajó por primera vez en 1907, conoció la obra de los impresionistas, y poco después, en Berlín, estuvo unos meses en el estudio de Lovis Corinth. Su estilo artístico se inició dentro del impresionismo y el postimpresionismo francés y atravesó más tarde una fase fauve. En 1910, a través de su amigo Franz Marc, conoció a Kandinsky y durante un tiempo compartió la estética no-objetiva y las preocupaciones místicas y simbólicas de Der blaue Reiter.
El encuentro en París con Robert Delaunay, en 1912, fue para Macke una auténtica revelación. El cubismo cromático del artista francés, bautizado por Apollinaire como orfismo, se impuso en su pintura a partir de entonces. Los Escaparates de Macke pueden ser considerados una personal interpretación de las Ventanas de Delaunay combinadas con la simultaneidad de imágenes del futurismo italiano. El ambiente exótico de Túnez, adonde viajó en 1914 junto a Paul Klee y Louis Moillet, fue determinante para la creación de la estética luminista del final de su vida, etapa en la que realizó una serie de obras consideradas como obras maestras del color.
Su carrera se vio truncada por su prematura muerte en el frente de la I Guerra Mundial, en septiembre de 1914.