El Área de Restauración presenta un montaje expositivo dedicado al estudio técnico en torno a la obra de Edgar Degas En la sombrerería (1882), realizado con el mecenazgo de la Fundación María Cristina Masaveu Peterson.
El objetivo del proyecto, llevado a cabo durante algo más de un año, es entender de manera general la técnica pictórica del pastel utilizada por Degas y profundizar en la obra mediante la reflectografía infrarroja, la radiografía, la macrofotografía y el análisis en el laboratorio, avances tecnológicos que permiten identificar los materiales empleados y evaluar su estado de conservación.
El montaje comparte con los visitantes los resultados obtenidos tras esta investigación para enriquecer así el conocimiento sobre la manera de trabajar de este complejo artista.
- Lunes: 12:00 - 16:00 (acceso gratuito gracias al patrocinio de Mastercard)
- De martes a domingo: 10:00 - 19:00
24 y 31 de diciembre: 10:00 - 15:00
25 de diciembre y 1 de enero: museo cerrado.
Recursos

En el caso de la obra En la sombrerería, Degas utilizó como soporte un montaje semi industrial con una base de cartón corriente, de unos 7mm de espesor, reforzado por ambas caras por un papel, llamado de tiro, de color turquesa o verde azulado.

La factura del pastel es espléndida en la obra En la sombrerería. Degas consigue recrear de manera ágil y vibrante con estas barras de color las diferentes texturas de los sombreros y de la ropa de las mujeres, en las que podemos distinguir plumas, flores o rafia. Podemos además apreciar cómo superpone las distintas capas de color sin que se mezclen entre ellas y, sin embargo, las percibamos mezcladas a través de nuestros ojos.

Detrás de la técnica En la sombrerería de Edgar Degas se esconde una fórmula inédita. El artista buscaba dominar la técnica del pastel creando capas sucesivas de color, transparencias y contrastes. Para poder conseguir esto, necesitaba utilizar un fijativo que le permitiese trabajar sin emborronar los colores. Pero había un problema… los fijativos existentes en el mercado no le gustaban puesto que alteraban los tonos de los colores.

La radiografía nos ha permitido descubrir un elemento muy curioso atrapado en esta obra: un botón.
En la producción de cartones del siglo XIX se empleaba una pasta de celulosa poco refinada. En la mezcla se podían encontrar restos de otros materiales como telas, esparto, paja o incluso redes de pesca.




